El 1 de Enero de 1947, nuestro equipo se desliga definitivamente del Ejercito del Aire y pasa a denominarse oficialmente, Club Atlético de Madrid. El cambio no sólo afectó al nombre, sino también al escudo, que pierde la corona ducal y las alas, adoptando su forma más reconocida.
Lo cierto es que este modelo se vistió sin escudo durante la mayor parte del tiempo. De hecho, las dos ligas consecutivas de 1950 y 1951 fueron conquistadas sin escudo en el pecho, tan sólo con las “rayas canallas”.
La única camiseta de esta época que hay en la colección es una réplica de Toffs muy conseguida, como se puede ver si se compara con la que vistió Koke durante la presentación de las nuevas camisetas para la temporada 2021-2022.
El Atlético de Madrid decidió celebrar su 120º cumpleaños con una camiseta que homenajeara a nuestra primera indumentaria blanquiazul y, una vez más, el homenaje se volvió a quedar corto. Detalles como la no alternancia de colores en mangas y espalda o la utilización de un escudo solamente parecido al original, hicieron que la buena gente de “Contracamiseta” se pusiera de nuevo manos a la obra.
Estamos, una vez más, ante una prenda que rezuma sentimiento atlético por los cuatro costados y, lo más importante, respetuosa con nuestra Historia y con nuestros símbolos.
Cuello de polo y alternancia completa de colores blanquiazules en mangas y espalda. En la parte frontal derecha aparece nuestro año de fundación, 1903. Y si nos vamos a la espalda, un gran cinturón sublimado, igual al del propio escudo, sirve para enmarcar un dorsal 6 de color negro, en clara alusión a nuestro Capitán, Koke. En la parte inferior del propio dorsal se puede leer la palabra “Club”, lo que, en muchos sentidos, hemos dejado de ser y a lo que, sin duda, habría que intentar regresar.
Al igual que en la anterior, el diseño queda completo y perfecto tras añadirle el escudo original con sus colores correctos.
En la década de los 60 las camisetas de fútbol empiezan a cambiar su fisonomía para parecerse algo más a lo que conocemos hoy en día.
En el caso del Atlético de Madrid, el tejido pasa a ser de algodón y el cuello se vuelve redondo, dejando atrás ya el modelo “tipo camisa” abotonado.
Es cierto que el primer equipo nunca utilizó esta equipación, pero en el caso de las categorías inferiores, lo estarían haciendo hasta bien entrada la década de los 70.
La única camiseta de esta etapa que hay en la colección es una réplica de Toffs. Para darle algo más de empaque, he cambiado el escudo por uno más acorde a la época que representa y he puesto en la espalda un nº 8 imitando aquellos míticos dorsales de “Cóndor”.
En el año 2022 y tras la presentación de las nuevas camisetas del Atleti para la temporada 2022-2023, un grupo de aficionados colchoneros, hartos de que Nike (con el beneplácito de la directiva) mancillara una vez más la historia del club con un diseño esperpéntico, decidieron crear una prenda que fuera fiel a la más pura tradición atlética, algo de lo que volver a sentirse orgullosos.
El resultado fue la “Contracamiseta”, una zamarra rojiblanca de corte clásico y cuello de polo con un montón de guiños a nuestra gloriosa Historia.
A saber, el botón que cierra el cuello es, ni más ni menos, que nuestro primer escudo. Sublimada en la parte frontal del diseño se puede ver una imagen del antiguo Metropolitano junto a la palabra “Stadium”. Ya en la espalda, unas alas en la parte superior, recuerdan al Atlético Aviación. Y por si todo eso fuera poco, el hueco del dorsal, con la forma de nuestro escudo, alberga uno de nuestros números más míticos, el 8, vestido por grandísimos jugadores pero que, irremediablemente, nos recuerda al gran Luis Aragonés.
Yo quise rematar el diseño añadiendo el escudo que estuvo con nosotros desde 1947 hasta 2017, y colocándolo, como no podía ser de otra manera, a la altura del corazón.
Cuenta la historia que corría el año 1909 cuando, aprovechando el viaje de Juan Elorduy (jugador por entonces del Athletic Club de Madrid) para pasar las Navidades en Londres, recibió el encargo del Athletic Club de comprar unas nuevas camisetas blanquiazules, iguales a las usadas por el Blackburn Rovers FC, para sustituir a las viejas, ya muy desgastadas por el uso.
Los días iban pasando y el bueno de Juan no era capaz de encontrar las dichosas zamarras, de tal modo que, casi al final de su viaje y ya en la localidad de Southampton desde donde partía su barco de vuelta a Bilbao, tomó una decisión que cambiaría para siempre la historia, tanto del Athletic Club como del Atlético de Madrid.
Para no volver de vacío decidió comprar 50 camisetas del equipo local, unas llamativas prendas que destacaban por sus rayas rojiblancas verticales. El Athletic Club sólo se quedó 25 de esas camisetas que empezó a utilizar ya desde el mes de enero de 1910. Las otras 25 quedaron guardadas en casa de los abuelos de Juan.
No sería hasta un año después cuando, tras un enfrentamiento entre bilbaínos y madrileños, estos últimos quedaron maravillados con la nueva indumentaria y se interesaron por ella. Juan Elorduy recordó las “otras” 25 camisetas y las puso a disposición del Athletic de Madrid, que finalmente las estrenaría el 22 de enero de 1911 frente a la Sociedad Gimnástica Española.
Esa es la historia mayormente aceptada como cierta, aunque también existe un estudio realizado por el investigador del deporte vasco, Borja Valle, junto a la peña oficial de Sunderland AFC, Bilbao Black Cats, y los historiadores ingleses, Keith Gregson, Mike Gibson, Andrew Smithson y Rob Mason. Dicho estudio habla de que el equipo inglés «origen» no sería el Southampton FC sino el Sunderland AFC y que afirma también que el primer partido vestidos de rojiblanco no fue el de enero de 1911, sino un amistoso disputado contra el Madrid FC el 27 de noviembre de 1910.
Sea como fuere, de lo que no hay duda es de que, aquel primer once rojiblanco, compuesto por esforzados aficionados al foot-ball, formó con una zamarra igual que esta.
Hay dos piezas de este histórico modelo en la colección. La primera es una réplica que sacó el diario «El Correo».
Y la segunda es una réplica bastante similar a la anterior pero, en este caso, confeccionada por la marca inglesa, Toffs.
Mita se despidió del Atleti con la temporada ya comenzada, así que el Club pensó que sería buena idea dejar el espacio destinado a la publicidad en blanco, en busca de algún nuevo patrocinador que quisiera participar en el proyecto. De esta guisa vistieron los nuestros durante el mes de Enero de 1990, pero finalmente el “experimento” no salió bien y se volvió a una camiseta completamente “limpia”.
Un modelo que la “Reina del Pop” se encargó de hacer mítico. Inolvidable aquel concierto de Madonna en el Vicente Calderón en Julio de 1990, como inolvidables fueron sus bailes ataviada con una rojiblanca similar a esta.
Completamente original y con el nº 10 a la espalda del grandísimo Paulo Futre, es una de las piezas más importantes de toda la colección.
El Atleti empezó a vestir el famoso “tejido de los pumas” esta temporada. Una de las camisetas más reconocibles de todas las que ha vestido el Atleti a lo largo de su historia y, para mí, una de las más bonitas.
Además, este modelo consiguió ganar dos Copas del Rey de forma consecutiva en el campo de nuestro eterno rival. La primera de ellas, disputada el 29 de Junio de 1991 frente al Mallorca, supuso nuestro 7º título y el primero de la “Era Gil”. Un gol en la prórroga de Alfredo Santaelena nos daba la victoria en las postrimerías del encuentro, llevando el delirio a la grada colchonera, entre la que nos encontrábamos mi Padre, mi Hermano y yo. Mi primer partido del Atleti en vivo y en directo.
Este diseño también se usó durante la temporada siguiente, en la que se consiguió la segunda copa consecutiva.
La camiseta de juego llevaba la publicidad de Marbella, pero la que se podía comprar en tienda iba completamente “limpia” y era exactamente igual a esta. Es completamente original, sin dorsal y en manga corta. Se puede considerar una de las joyas de la colección.
Es evidente que estamos ante una de las zamarras más simples de todas las usadas a lo largo de la historia por el Atlético de Madrid. Es completamente azul, únicamente el escudo rompe la monocromía a la altura del pecho.
Pese a no usarse mucho, esta 2ª equipación se pudo ver en el Estadio El Molinón el día 10/03/1976, durante el partido que nos enfrentó al Sporting de Gijón en la ida de los octavos de final de la Copa del Generalísimo, la última que se disputó bajo esta denominación y en la que nuestro equipo terminó alzando su 5º título de Copa. Aquel día, los colchoneros vestidos de azul, se impusieron a los rojiblancos sportinguistas por un resultado favorable de 1-2.
También apareció en el Estadio de San Mamés el día 13/02/1977, en el partido correspondiente a la jornada nº 22 de la Liga 1976-1977 y en el que los atléticos se impusieron a los bilbaínos por 0 goles a 1. Una victoria que contribuyó a que, finalmente, nuestro equipo levantara su 8º campeonato nacional de Liga.
La camiseta es una réplica promovida por el gran “replicante”, que también es el responsable de otras “joyas” de la colección. Se trata de un modelo en manga larga con el nº 6 a la espalda. En aquellos años los dorsales aún no eran fijos, así que varios jugadores vistieron dicho número, algunos de ellos tan históricos como Eusebio Bejarano, Adelardo, Robi o Alberto Fernández.
Con D. Rubén «Ratón» Ayala en el homenaje que le tributaron «Los 50» el día 06/11/2023 en Madrid.
Con D. Adelardo Rodríguez, una de las más Grandes Leyendas del Atlético de Madrid.
Con D. Ramón «Cacho» Heredia, otro gran jugador argentino que llegó al Atleti de la mano de Ayala.
Con D. Iselín Santos Ovejero, «El Cacique del Área». Tremendo defensa argentino que militó en nuestro equipo durante la primera mitad de los años 70.
Con Iselín Santos Ovejero y Eva Escudero, hija del mítico Adrián Escudero.
Otra de esas segundas equipaciones inscrita con letras de oro en la Historia del Atlético de Madrid. Y es que, bien se podría decir que esta camiseta ganó un Oscar de Hollywood, debido a su aparición en la película «Volver a empezar», una obra maestra del reconocido director colchonero José Luis Garci.
El partido que se puede apreciar en alguna escena de la película no es otro que el correspondiente a la 6ª jornada de la temporada 81-82 que enfrentó al Sporting de Gijón con el Atléti en el Estadio El Molinón el 18 de Octubre de 1981 y que terminó con victoria sportinguista por un resultado favorable de 3-2.
La camiseta es una réplica promovida por el gran “replicante”, que también es el responsable de otras “joyas” de la colección. Es completamente azul con detalles rojiblancos en cuello y puños. Tiene el nº 11 a la espalda en homenaje a Juan José Rubio, el habilidoso delantero que llego a ser internacional con España y que fue el autor del pase a Ruiz en el primer gol de aquel histórico partido.
Con Juan José Rubio, habilidoso extremo que jugó en el Atleti entre 1975 y 1987. Llegó a ser internacional con España.
Es muy probable que estemos ante una de las segundas equipaciones más míticas de toda la Historia del Atlético de Madrid. Eso es así gracias a «La Batalla de Glasgow», el nombre con el que se conoce al épico partido disputado entre los nuestros y el Celtic de Glasgow durante la ida de las semifinales de la Copa de Europa de aquella temporada.
El encuentro tuvo lugar el 10 de Abril de 1974 en un Celtic Park que aquel día se llenó para ver la disputa entre escoceses y españoles. En aquel momento, el Celtic era uno de los mejores equipos de Europa y entre sus filas destacaba Jimmy Johnstone, un habilidoso extremo que no olvidará jamás aquel día.
El Atleti, lejos de amedrentarse ante el hostil escenario, planteó un partido muy defensivo y, por qué no decirlo, violento en muchas ocasiones, para frenar las acometidas del Celtic que no dejaba de percutir la portería colchonera, defendida en aquella ocasión por un Miguel Reina que tuvo una actuación estelar.
Cabe resaltar que esa «violencia» no sólo venía del lado rojiblanco, los escoceses también dieron lo suyo, pero como era de esperar, los jugadores atléticos fueron recibiendo amonestaciones y expulsiones hasta quedar en el campo únicamente con 8 jugadores. Aún así, y gracias a una impresionante defensa «numantina», nuestro equipo consiguió mantener un valioso empate a cero que le daba muchas esperanzas de cara al partido de vuelta.
Tras finalizar el encuentro vinieron las tanganas, las agresiones por parte de la policía y los desprecios en el aeropuerto, pero todo quedaría en el olvido cuando unos días después, en la vuelta en el Calderón, los colchoneros pasaban por encima del Celtic con dos goles de Gárate y Adelardo. El Atleti se plantaba así, por primera vez, en la gran Final de la Copa de Europa.
Hay dos réplicas de esta camiseta en la colección, las dos promovidas por el gran “replicante”, que también es el responsable de otras «joyas» de la colección. Completamente rojas con detalles rojiblancos en cuello y puños. La primera es en manga larga y tiene el nº 3 a la espalda en homenaje a «Panadero» Díaz, el bravo defensor argentino que también acabó expulsado aquel histórico día.
«La Batalla de Glasgow». 10/04/1974
La segunda réplica es en manga corta, tiene el nº 10 a la espalda y una curiosa historia detrás. Cuentan los sabios que el gran Dirceu, como buen «canarinho» (que no carioca, Txetun dixit), no se llevaba demasiado bien con las mangas largas, así que, no dudó en acudir a una modista madrileña que, con tijeras, aguja e hilo, le solucionó el problema.
¿Realidad? ¿Leyenda? Lo cierto es que la camiseta existió, y este es mi pequeño homenaje.
Antoine Griezmann se enfundó esta camiseta el 25/10/2023 al finalizar el partido de fase de grupos de Champions League que nos enfrentó al Celtic FC en Glasgow.
Mi colección de camisetas del Atleti 